lunes, 14 de septiembre de 2009

Tras un diagnóstico de perlesía cerebral


He escrito en variadas ocasiones sobre la perlesía cerebral como resultado de la impericia médica. En un anterior ensayo sobre este tema concluía que detrás de cada niño especial definitivamente existe un padre especial y cada día me convenzo más de ello.

Estando la pasada semana fuera de Puerto Rico, recibí un correo electrónico de parte de una madre especial de un niño especial que sufre de perlesía cerebral desde su nacimiento, como resultado de una impericia médica. En ese caso demandamos al médico obstetra y al hospital que tenía al otro médico empleado. Hace alrededor de dos años que en esa demanda se obtuvo una compensación económica, tanto para beneficio del menor como de sus padres. La correspondiente al niño, por supuesto, fue consignada para su beneficio en el tribunal, sujeto a la autorización judicial previa para su uso, aunque la de sus padres la han destinado también para su hijo.

El correo recibido me emocionó mucho y no quise esperar más para compartir parcialmente su contenido con mis lectores. Con su autorización previa, lo he editado un poco con el fin de proteger la identidad de los protagonistas, cuyos nombres son ficticios, por supuesto.

“Saludos Licenciado,
Espero que usted y su familia se encuentren bien. No sé si ha visto fotos recientes de Antonio, pero ¡ya está caminando con bastones!!! En mayo lo llevamos a Alemania para el trasplante de’ stem cells’ que le había mencionado en un momento dado. En julio lo llevamos de nuevo a las terapias intensivas en Orlando. A la Vista sobre autorización judicial llevé a Antonio y se robó el corazón de medio mundo en esa Sala.
El trasplante fue con células autólogas de su médula ósea. A los 4 días notamos una mejoría bien notable en la espasticidad y fue progresivo. Estoy segura que esto lo ayudó grandemente a poder caminar con bastones y a mejorar su balance.Ahora estoy investigando de un Programa de Alimentación Intensiva en Virginia donde trabajan en ayudar a niños como Antonio a mejorar en esta área. Antonio aún come sólo puré, yogurts, ‘baby foods’ y líquidos. Ayer hablé con una persona del programa y el asunto sale entre $1,300 - 1,500 DIARIOS y puede extenderse a varias semanas. Ya Antonio camina y está en la escuela así que me siento lista para regresar al grupo laboral.
¿Por qué le dejo saber esto? Para que vea que hoy en día algunos miles de dólares no dan para mucho cuando uno tiene un niño con necesidades especiales. Pero gracias a Dios, lo de la demanda nos ha ayudado a tener a Antonio como se encuentra hoy. Hay madres que me han dicho que prefirieron no demandar en sus casos, pero yo les dejo saber que si no fuera por eso Antonio no estuviera tan adelantado porque, definitivamente, el peso económico es gigantesco. No hubiéramos podido ofrecerle las oportunidades que ha recibido hasta ahora.
Nada, sólo un largo "up-date" del nene porque sé que también podría beneficiar a otros niños que usted conozca. Muchas gracias por su lucha contra la impericia médica.”


Los niños con perlesía cerebral requieren y requerirán toda su vida de muchos cuidados especializados, como testimonia el contenido del correo que les copio. Huelga decir que este cuidado resulta sumamente costoso y hasta complicado.
Los niños con perlesía cerebral merecen la oportunidad de tener una mejor calidad de vida y el único vehículo que tienen para lograrlo resulta ser el esfuerzo combinado de sus padres. Por la confusión que puede haberse generado la comunicación, quiero, por último dejar bien claro que los padres que decidieron alguna vez no demandar no lo tienen todo perdido. deben conocer que aún tienen oportunidad para reclamar una justa compensación para sus hijos. Los padres de estos niños especiales aún tienen la oportunidad de intentar mejorar su calidad de vida, si es que la condición del niño o de la niña fue el resultado de una impericia médica o de negligencia hospitalaria.

Los adultos renuncian a sus propios derechos a reclamar sus daños cuando no los ejercitan dentro de un período de tiempo relativamente corto, porque la ley presume que la inacción denota dejadez y falta de interés en reclamarlos. Sin embargo, los niños con perlesía cerebral están incapacitados y, por ello, nuestro sistema de derecho concede a los padres la oportunidad de reclamar en los tribunales, no ya sus derechos que renunciaron, sino los derechos de sus hijos a una compensación justa y razonable por sus daños.

Estos niños especiales MERECEN justicia que llega mejorando la mejor calidad de vida que los padres, junto a sus abogados que defendemos y reclamamos sus derechos en los tribunales, podamos brindarles. Luego de un diagnóstico de perlesía cerebral, estos niños no merecen nada menos que eso.

1 comentario:

Edna Andujar dijo...

Ya yo había hablado con ella por medio de Facebook y me alegré mucho de saber de los grandes resultados de la cirugía con su hijo porque verlo a él es como ver a mi hijo. Ahora me alegro mucho más al ver este comentario en su blog. La verdad que si uno piensa en uno mismo uno no realiza ninguna demanda para olvidarse de lo sucedido, pero la realidad es que uno tiene que pensar en el bienestar para nuestros hijos y esto es lo que me mantiene fuerte para seguir con el proceso, porque yo quiero lo mejor para mi hijo y espero en un futuro no muy lejano poder estar gozando de todas y muchas otras cosas por las que ha estado pasando mi gran amiga en el comment y su hijo bello, porque es precioso. No nos hemos conocido personalmente, pero hemos hablado por internet y telefónicamente y es una gran amiga, compartimos todas nuestras preocupaciones, felicidades y nuevas tendencias en todo lo relacionado con niños especiales y me alegra mucho. Por otro lado me alegra mucho saber lo del programa de alimentación porque a mi hijo yo trato de darle de todo, pero también recurro al puré y cosas blanditas porque necesita ganar peso y alimentarse bien, aunque él masca y chupa bien ahora, se cansa muchas veces y tengo que usar el tubo de alimentación para asegurarme que se alimente. Así que les recomiendo a toda madre que ha sufrido un daño en su parto y a consecuencia tiene un hijo con esta condición como el mío o el de mi amiga a que lo piense bien y sobretodo piense en su hijo porque estos niños necesitan mucha ayuda y día a día tenemos que luchar por ellos para darles un mejor porvenir y ayudarles a que la vida sea un poco más fácil para ellos, porque ellos se lo merecen y te lo agradecerán en el futuro y Dios te bendecirá por todo lo que hagas por ellos y eso te lo puedo asegurar.